Un feminicidio peor que el del Norte
Reportaje de Humberto Padgett Fotografías: Eduardo Loza Revista Emeequis abril de 2010 En las tierras gobernadas por Enrique Peña Nieto, uno de los más aventajados aspirantes a la Presidencia de la República en 2012, ocurre un fenómeno poco atendido: mientras un coro de mujeres grita “¡Enrique, bombón, te quiero en mi colchón!”, tras lo cual caen rendidas cuando reciben una foto del gobernador, otro amplio grupo de mujeres también cae, pero estas muertas, asesinadas, en un feminicidio silencioso pero efectivo. Porque el del estado de México es peor que el de Ciudad Juárez. Cualquiera que revise las averiguaciones previas se dará cuenta de que las víctimas no dejan de sufrir cuando mueren. La tortura se extiende gracias a que la procuración de justicia en esa entidad tiene la habilidad de convertir un asesinato en un absurdo suicidio, para lo cual es capaz de torcer toda la historia. Es el caso de Nadia Muciño, pero no es la única. Como ella, hay cientos o miles…